A Subela de Foz: "Queremos organizar unos Cantos de Taberna y contar con grupos de la comarca"
AMariñaXa
La Asociación Folclórica e Cultural cumple 26 años y mantienen citas consolidadas como el Festival Aires do Masma o el Festival de Nadal, mientras seigue luchando por conservar nuestras tradiciones
10 nov 2024
Lucía Blanco
La Asociación Folclórica y Cultural A Subela lleva desde lo 1998 apostando por nuestra tradición después de que un grupo de focegos se había animado a dar el paso y constituir el grupo con el objetivo de "conservar y difundir el folclore gallego en todas sus manifestaciones tanto en baile como en cuanto como en música", recuerda Cris, vocal del colectivo. El propio nombre ya deja claro la filosofía de la entidad. "La subela es un instrumento que emplea un carpintero para agujerear el cuero, la goma o la madera y que se usaba en la fabricación de las panderetas".
Desde sus inicios, luchan por promover festivales folclóricos, recuperar músicas, cuantos y bailes tradicionales ya olvidados, impartir cursos y, en general, desparramar nuestra cultura. Actualmente, unos 35 miembros, entre músicos y bailadores, forman parte de esta agrupación que no entiende de generaciones, pues el Subeleiro más pequeño tiene apenas 5 años y el más veterano, 60. "Aunque es cierto que nos gustaría tener más volumen de niños bailando y tocando, por ahora tenemos muy buen relieve y esperamos que vaya creciendo y que sigamos aumentando la familia". Entre sus citas más consolidadas, mantienen el Festival de Nadal A Subela, que será el 21 de diciembre, y el Festival Aires del Masma, que celebran al final de cada curso, en el mes de julio. Este año iniciaron también un grupo sénior que, más allá de aprender el baile, están preparando unos cantos de tarbena.
"Andamos a vueltas con ellos y tenemos como objetivo establecer una cita fija, pero hay que matizar los detalles y darle vida a la propuesta, aunque esperamos sacarla adelante, poder contar con grupos de la comarca y hacer una edición aquí para todos". Proponerse organizar eventos de este tipo no resulta nada sencillo. "Como #cualquier otra actividad que te propones hacer tiene su trabajo previo, que no se ve y que muchas veces no se valora. En los festivales, por ejemplo, hay que buscar grupos convidados y patrocinadores para poder hacerle frente económicamente a los gastos y lleva un tiempo.
No es fácil, pero cuando ves el resultado queda un satisfechos y daste de cuenta de que todo el esfuerzo mereció la pena", asegura. La respuesta de los que asisten siempre deja buen sabor de boca y anima a seguir trabajando a favor de estas iniciativas. Público fiel "Siempre nos acogen muy bien en los dos festivales, les gusta vernos bailar y escuchar nuestra música. No del Aires del Masma también entra en juego que se hace en un espacio abierto, en la plaza Conde Fontao, y en pleno verano, pero siempre tenemos muy buena respuesta y un público muy fiel que se agradece". Además, acumulan actuaciones en otras celebraciones como son el Festival del Emigrante de Vilaronte, las Fiestas del San Lourenzo y del Carme o las patronales de Santiago de Fazouro, entre otras. "Todas son especiales, muchas por tradición, porque son ineludibles y ya las tenemos marcadas y vamos año tras año. No caso de nuestros festivales también tenemos el plus de que estamos pendientes de que todo falda bien y esté bien organizado".
El repertorio lo escogen los maestros. "Tanto lo de baile como lo de gaita y percusión. Se ponen de acuerdo en las piezas a tocar y bailar". Exige, por lo tanto, un compromiso por parte de todos los miembros, que ensayan cada semana. "A veces en las semanas previas de los festivales también se hace algún ensayo extra para perfeccionar aquellas piezas que puedan estar más verdes", dice. Pero formar parte de una asociación como La Subela no es so tocar o bailar. "Los maestros hacen un gran trabajo de divulgación cuando quieren recuperar una pieza. Buscan toda la historia o se acercan hasta una aldea para encontrarse con los mayores y que le canten aquella canción que interpretaban cuándo iban las faenas del campo. Ese trabajo de divulgación existe y pienso que no se valora lo suficiente".
Además de dinamizar la vida del pueblo y conservar las tradiciones y la propia historia de la villa, Cris hace especial hincapié en toda la herencia que el tejido asociativo logra mantener viva. "No nos damos cuenta del bagaje que hay que ir recuperando para no perderla, es una gran riqueza. Poco a poco y con el trabajo de los grupos y de los que estamos metidos en esto intentaremos ir sacando todo nuestro folclore y que la gente sepa apreciarlo como verdaderamente se merece".