Santiago de Abres celebra las fiestas de Santiago y Santa Ana como símbolo de unión entre Galicia y Asturias

La parroquia de Santiago de Abres, situada en la frontera entre Galicia y Asturias, se prepara para celebrar un año más las tradicionales fiestas en honor a Santiago y Santa Ana, una cita que se ha convertido en un referente de convivencia y hermandad entre vecinos de ambas comunidades.
El Concello de Trabada vuelve a colaborar en la organización de estas fiestas que combinan tradición, música, gastronomía y espíritu comunitario. El programa arranca el sábado 19 de julio, con un Campeonato de Balinera con carabina en el Campo da Festa a partir de las 19:30 horas, seguido de una gran churrascada popular amenizada por el DJ Marcos, que promete congregar a cientos de personas.
Las celebraciones continuarán el jueves 25 de julio, Día de Galicia, con una misa solemne a las 13:00 horas y una sesión vermú con el Dúo Belinda. Ya por la noche, la verbena contará con las actuaciones de las orquestas Suavecito y Costa Dorada, ofreciendo una noche de baile y música para todos los gustos.
El sábado 26 de julio se celebrará la última jornada festiva, con una nueva misa, una sesión vermú a cargo del DJ Pedro Brmudz, y una verbena final con las actuaciones de El Combo Dominicano, la discoteca móvil Mandala Macroshow y una nueva sesión de DJ, que cerrarán las fiestas por todo lo alto.
El alcalde de Trabada, Rubén García, destacó el significado de este evento: “Es un ejemplo claro del espíritu de unión entre Galicia y Asturias. Santiago de Abres representa esa hermandad entre pueblos que comparten historia, cultura y vínculos familiares”.
García también subrayó el compromiso del Concello con el tejido social local: “Seguimos apoyando a todas las asociaciones, clubes y comisiones de fiestas del municipio. Creemos que es fundamental respaldar iniciativas que dinamizan la vida de nuestras parroquias”.
El Concello de Trabada anima a toda la ciudadanía y a los visitantes a sumarse a esta celebración única en la frontera natural entre dos comunidades, que mantiene viva la esencia de las fiestas populares y el sentimiento de pertenencia compartido.