Preocupación en la Plataforma por las reformas en el parque de San Miguel y la pérdida de vegetación

La Plataforma en Defensa de los Árboles de Ribadeo ha vuelto a alzar la voz ante dos cuestiones que preocupan a un sector cada vez más amplio de la ciudadanía: la eliminación de elementos verdes en espacios públicos y el traslado del centro de salud fuera del núcleo urbano.
En un comunicado difundido esta semana, el colectivo muestra su rechazo al proyecto anunciado por el Concello para reformar el parque próximo a la capilla de San Miguel. Según se recoge en la página web municipal, con fecha de 24 de marzo, el plan contempla “eliminar todos esos setos vegetales y colocar una barandilla de madera que garantice la seguridad”.
Desde la plataforma califican de injustificada esta medida y se preguntan en qué pueden afectar los setos a la seguridad de niños, mayores o viandantes. “Los ligustros son arbustos ornamentales, de hoja perenne, que aportan belleza y densidad, y no representan ningún riesgo evidente”, aseguran. Lamentan la falta de argumentos técnicos o sanitarios que avalen su retirada, y critican el uso reiterado del término “eliminación”, que consideran sintomático de una política ambiental poco sensible.
Recuerdan además ejemplos recientes, como la retirada de arbustos en la plaza Pancho Maseda para facilitar el paso de ambulancias, un argumento que quedó en entredicho semanas después cuando el espacio fue cerrado por una exposición publicitaria. “El tiempo acaba poniendo en evidencia las contradicciones”, afirman.
El comunicado también lanza una petición para que se eliminen definitivamente los eucaliptos que aún existen cerca de viviendas y fábricas con riesgo de incendio. “Basta con dar un paseo por el rural para comprobar situaciones que deberían resolverse cuanto antes”, añaden.
Por otro lado, el colectivo abordó en su última reunión el traslado del centro de salud de Ribadeo a las afueras del casco urbano, a más de un kilómetro del emplazamiento actual. Consideran que se trata de un “error histórico” que perjudicará especialmente a la población mayor, al situarse en una zona con tráfico intenso y de difícil acceso. “Un gran aparcamiento no compensa los inconvenientes”, apuntan, recordando que la mayoría de las más de 700 personas que acuden cada día al centro lo hacen caminando y aprovechan para hacer compras o tomar algo en el centro de la villa.
Pese a las decisiones ya adoptadas por el Concello y la Xunta, desde la plataforma consideran que “gran parte de la población no está suficientemente informada” y que, si lo estuviera, “posiblemente este proyecto no seguiría adelante”.
Como respuesta, el colectivo organizará una marcha informativa —que no será una manifestación— para recorrer caminando el trayecto entre el actual centro de salud y la zona donde se proyecta el nuevo. El objetivo es recopilar información sobre accesibilidad, tiempo de desplazamiento, tráfico y otros elementos, y compartirla con quien esté interesado, “desde la responsabilidad y el civismo”, concluyen.